Por: Monica Hefferan
Una de las preguntas más frecuentes que he
recibido por parte de mis pacientes es: No puedo dejar de pensar en comida,
¿qué puedo hacer? Y es por eso que el día de hoy quiero compartir este artículo
contigo.
Primero que nada, te quiero que entiendas que
la situación que estamos viviendo hoy en día genera mucho estrés, y muchas
veces usamos la comida como un curita para aliviar este estrés
emocional.
La nutrición emocional se refiere a aquellas
veces que recurrimos a la comida para sentirnos más cómodas, para aliviar el
estrés o para recompensarnos. Va más allá de satisfacer el hambre física, y
generalmente tendemos a buscar comida chatarra, dulces y otros alimentos poco
saludables. Desafortunadamente, la alimentación emocional
no soluciona los problemas emocionales, de hecho, generalmente nos hace sentir
peor.
Después de un atracón de comida no solo permanece el problema emocional
original, sino que también nos sentimos culpables por comer en exceso y no podemos
dejar de pensar en la comida.
Quiero que te quede claro que el hambre
emocional no se puede llenar con comida. Puede que comer se sienta bien en el
momento, pero los sentimientos que desencadenaron el uso de la comida todavía
están ahí y, por si fuera poco, muy seguramente te juzgas por haber comido en
exceso, por equivocarte y no tener más fuerza de voluntad.
Pero la buena noticia es que no importa cuán impotente te sientas ante
la comida, SI es posible hacer un cambio positivo. Puedes aprender formas más saludables de
lidiar con tus emociones, evitar los desencadenantes que te impulsan a comer,
detener los antojos y esos pensamientos obsesivos ante la comida. Pero para que
esto suceda, es muy importante que entiendas la diferencia entre el hambre emocional
y el hambre física, y hay pistas que puedes buscar para ayudar a distinguir el
hambre física de la emocional:
1. El hambre emocional aparece de repente.
2. EL hambre emocional parece en forma de
“antojo” de algo muy específico.
3. El hambre emocional no se satisface una vez
que te sientes físicamente satisfecha.
4. En lugar de un estómago que gruñe, sientes el
hambre como un deseo que no puedes salir de tu cabeza.
Para dejar de pensar obsesivamente en la
comida, debes encontrar otras formas de satisfacerte a nivel emocional.
Entonces lo primero que te sugiero hacer es dejar de juzgarte y en lugar de
esto amarte más. Esto implica darte cariño y abrazo aún en las situaciones más
difíciles, incluyendo las veces que te des cuenta estás comiendo emocionalmente.
En lugar de enojarte contigo misma y frustrarte con tu situación, date
un abrazo y di en voz alta que cuentas contigo. Al fin de cuentas lo que
buscamos a través de la comida es sentirnos seguras, protegidas y en control.
La clave es preguntarte a ti misma: ¿Qué actitudes puedo tener conmigo misma que
me hagan sentir segura, protegida y en control? Teniendo el amor como base, también necesitas
alternativas a la comida a las que puedas recurrir para tu satisfacción
emocional, y para esto, te compartir técnicas super efectivas que te pueden
ayudar a romper con esos patrones obsesivos de pensamientos:
a) Si estás deprimida o sola, llama a alguien
que siempre te haga sentir mejor, juega con tu perro o gato, mira tú foto
favorita o piensa en tu recuerdo favorito.
b) Si estás ansiosa, saca tu energía nerviosa
bailando tu canción favorita, apretando una pelota antiestrés o dando una
caminata rápida.
c) Si estás exhausta, sírvete una taza de té
caliente, báñate, enciende algunas velas perfumadas o envuélvete en una manta
tibia.
d) Si estás aburrida, lee un buen libro, mira
un programa de tele que te guste, sal a caminar o realiza alguna actividad que
disfrutes (tejer, escuchar música, bailar, tocar algún instrumento, álbumes de
recortes, etc.)
e) Haz una pausa cuando lleguen los antojos y
presta atención a lo que estás sintiendo. Este es un paso sumamente importante.
Espero que estos consejos te ayuden y por
experiencia propia, te puedo decir que realmente hay una salida, y que hay
mucha luz al final del camino, solamente es cuestión de que abras tu corazón y
empieces a confiar en ti. Con cariño,
Monica
Acerca del Mónica
Es autora y fundadora de Nutrición Energética. Tiene una Licenciatura y
Maestría en Nutrición por la Universidad de Columbia y trabaja como experta en
nutrición, https://monicarodriguez.mx/
Instagram: instagram.com/monica.hefferan/